jueves, 3 de diciembre de 2009

La evaluación muestra parte del currículo oculto del profesorado.

La evaluación muestra parte del currículo oculto del profesorado.
Dentro de un marco curricular educativo debe ser la evaluación la que dicte las pautas en las que deben girar todo dispositivo pedagógico, y no cambiar una práctica educativa sin antes orientar una evaluación, para que el planeamiento didáctico pueda dar lugar a una pedagogía diferenciada.
Así, este proceso de evaluación deja de ser tan temido y poco gratificante, y considera la diversidad de necesidades las cuales nos encontramos dentro de un proceso de enseñanza.
Un dispositivo pedagógico debe contemplar en las áreas curriculares la diversidad y girar alrededor de una regulación continua, adecuando procedimientos del profesorado al proceso del estudiante y la autorregulación para que cada discente aprenda, sea más autónomo, y además, continuo en todos los componentes permanentes.
La evaluación como regulación.
Etapas de la evaluación:
• Recolección de información.
• Análisis del informe y juicio sobre el resultado del análisis.
• Toma de decisiones de acuerdo con el juicio emitido.
Funciones:
• Carácter social de selección y de clasificación.
• Carácter pedagógico (regulador del proceso de enseñanza-aprendizaje)
Con respecto al carácter social, el alumnado se somete a esta evaluación para ser seleccionado, clasificado por la sociedad u orientarse en su proceso de enseñanza.
Además, con el carácter pedagógico se ayuda a mejorar algunas de las partes de un proceso de enseñanza-aprendizaje.
Evaluación diagnostica inicial.
Determina la situación de cada alumno al inicio de un proceso de enseñanza-aprendizaje y así dictamina sus necesidades, esta se divide en la prognosis (colectivo) y la diagnosis (individual) las cuales son imprescindibles para el diseño y sustentación de un proceso de enseñanza-aprendizaje, esto con relación al profesorado, y a los estudiantes a tomar conciencia de su punto de partida permitiéndoles la exploración y el conocimiento de los siguientes aspectos:
• Del grado de adquisición de los prerrequisitos de aprendizaje.
• De las ideas alternativas o modelos espontáneos de razonamiento y de las estrategias espontáneas de actuación.
• De las actitudes y hábitos adquiridos con relación al aprendizaje.
• De las representaciones que se hacen de las tareas que se les proponen.
Halwachs (1975) designó la expresión estructuras de acogida, que indica el conjunto de conductas, representaciones y maneras espontáneas de razonar propias del alumnado en cada estadio de su desarrollo, las cuales se van construyendo básicamente a partir de las expresiones en su vida diaria de su contexto sociocultural.
Evaluación formativa.
La evaluación formativa se da por una concepción de la enseñanza en la que los estudiantes van restaurando sus conocimientos y haciendo de sus errores un objeto de estudio, y de sus representaciones y estrategias elaboradas. El profesor con este tipo de evaluación regula el proceso de enseñanza-aprendizaje.
La evaluación formativa se centra en la regulación de las actuaciones pedagógicas y persigue los siguientes objetivos: la regulación pedagógica, la gestión de errores y la consolidación de los éxitos.
Evaluación sumativa.
Este tipo de evaluación se da por medio de un instrumento bien elaborado para así medir los conocimientos adquiridos y clasificar socialmente a un estudiante o bien se puede ver como un proceso formativo aunque no sea este su fin.
¿Es imposible aplicar sistemas de evaluación formativa?
Según Perrenoud (1991) la base de poder hacer una buena evaluación formativa se fundamenta principalmente en el trabajo de los y las estudiantes, los cuales deberán tomar primordialmente dos estrategias educativas que son: autorregulación de los aprendizajes y la interacción social en el aula.
La idea de que los estudiantes logren aprender a aprender depende del trabajo del profesor, ya que esto facilita el trabajo en el aula. El proceso que Perrenoud (1991) denominó la Auto-socio-construcción del saber se sustenta en los siguientes recursos principales: Auto organización y la interacción social.
La autorregulación de los aprendizajes.
Esto entendido como representaciones de las propias capacidades y formas de aprender. Para ello, cada estudiante debe conocer los objetivos en estudio, tener claro el dominio y la planificación por parte de la persona que enseña, así como la disposición para apropiarse de la construcción de su conocimiento.
Comunicación de los objetivos y la representación que de ellos hacen los estudiantes.
En esta etapa se cree necesario involucrar al alumnado en la planificación y en el proceso del aprendizaje, para poder lograr esto, lo necesario es que el profesorado redacte los objetivos de forma que los estudiantes puedan hacer representaciones de ellos, contextualizando las estrategias metodológicas y como ya se mencionó anteriormente, puedan apropiarse y sean capaces de priorizar los objetivos para aprender de forma autónoma.
La anticipación y la planificación de la acción
Es una predicción sobre el resultado que se obtendrá al realizarse un acto concreto, es el camino para llegar al objeto planteado. Planificar implica combinar tres elementos: el objetivo o finalidad fijada, las operaciones o acciones que le son propias y las condiciones internas de realización. Por tanto, es necesario propiciar situaciones didácticas que faciliten a los y las estudiantes aprender. Porque el profesorado no propicia estrategias pedagógicas que lleven al aprendizaje de las diferentes acciones necesarias para realizar la tarea propuesta.
La apropiación de los criterios e instrumentos de evaluación
Los criterios de evaluación son estrategias que constituyen otro de los elementos esenciales del proceso pedagógico, estos se valen de criterios como la autoevaluación, la evaluación mutua y la coevaluación para adquirir dominio de los contenidos y con esto proporcionar seguridad en las operaciones de anticipación y de planificación de la acción, en el cual sobresalen como elementos esenciales la verbalización, explicitación, contrastación y la evolución y mejora de las representaciones.
El marco en el que se produce la regulación continua de los aprendizajes
Un dispositivo pedagógico que complete la regulación continua de los aprendizajes puede ayudar a cada estudiante a progresar en la construcción del nuevo conocimiento, pues se adaptará a sus necesidades y éste deberá contener desde el punto de vista constructivista al menos los siguientes componentes: evaluación diagnóstica inicial, comunicación de los objetivos, comprobación de la representación que cada estudiante hace de ellos, así como la construcción del nuevo conocimiento y aplicación de las nuevas situaciones.
Por tanto, la evaluación es la pieza clave en el proceso pedagógico porque permite reconocer cuáles son las dificultades del alumnado y cuáles son las mejores estrategias para superarlas.

1 comentario:

  1. Es necesaio esto ya que la evaluación uno de los pilares en este proceso pedagogico que debe cumplir el estudiante ya que permite conocer fortalezas y debilidades. Lo mas importante es que el profesor reconozca es que se debe medir al alumno al nivel de lo que se ha enseñado y no medirnos a nosotros o medir lo que queremos que aprendan.

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